El telón de los disfraces se cerró
y la magia nos dejó su despedida.
Nos quedamos sin sus noches por febrero,
sin color, sin sus butacas vacías.
Sentado en un escalón del gallinero
soñaba por verme en tus brazos
aquella primera vez que me colé
siendo un niño al ritmo del 3 por 4.
Y siendo un niño también
temblando en tus bambalinas
entregué mi comparsa aquella primera vez
que me subí a un escenario.
Se nos fue.
En silencio, sin quejarse y sin quererlo
se nos fue tan solitario.
Se nos fue
una parte de los nuestro,
se nos fue nuestro teatro, nuestro Gran Vía.
Me encantaba compartir
la jarilla en Carnaval con adversarios y amigos
en ese ambigú,
rincón de los desafíos.
No me podría olvidar
del olor de tus pasillos llenos de disfraces
y ese pasacalle a pasar
los nervios de principiante.
Dime quién te ha dejado
para siempre sin tu fiesta,
sin tu gente, sin careta,
sin terminar cantando
tu Higuerita Marinera.
Se nos fue.
En silencio, sin quejarse y sin quererlo
se nos fue tan solitario.
Se nos fue
una parte de los nuestro,
se nos fue nuestro teatro, nuestro Gran Vía.
Manuel Carrasco. Si queréis oirla, buscad por www.clubdefansamigosdemanuelcarrasco.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario